Constantemente estoy siendo enfrentado a situaciones en las cuales tengo que tomar decisiones que me hacen crecer o caer, situaciones en las cuales tengo que tomar en cuenta mi pasado, presente y supuesto futuro. Y por más que me esfuerce en salir adelante, a veces tiendo a perder la concentración y en ese instante es cuando la vida me ataca con todas sus fuerzas, para probarme una y otra vez si soy digno de seguir su camino. A veces cuanto con la ayuda de otras personas y otras veces no, y no es un reclamo a no ser ayudado siempre, es una mera acotación, ya que en esta vida soy yo quien decide seguirla con todas mis fuerzas y es mi deber cuidarla y enfrentarla, saliendo adelante con la frente en alto y mi corazón intacto.
La vida no es fácil para nadie y para quien cree que si lo es, entonces aún no ha vivido realmente esta vida a todo su esplendor, ya que, no hay mayor dicha que el poder salir adelante ante las dificultades, y poder aprender de nuestros esfuerzos ante los problemas que se nos presentan, y con ese conocimiento ayudar a otras existencias a brillar en este mundo que deambula entre luz y oscuridad.
Sé que mi existencia es un punto en la grandeza de este universo, pero me esfuerzo por ser un punto que entregue a este mundo tanta alegría y ayuda como me sea posible, tanta luz y apoyo como me lo permita mi estancia en el tiempo, por eso me esfuerzo en querer más que en odiar, en reír más que en llorar, en ayudar más que en atacar, en vivir más que en morir, y en expresar más que en callar.
Y si en algo mis palabras te han podido servir, espero que las recuerdes para cuando las vuelvas a necesitar, y mientras tanto estaré aquí, esperando por ti, quien quiera que seas, para volver a darte algo con lo cual sientas que vale la pena vivir, justo aquí, en esta vida que a veces nos pone a pruebas sin fin, y otras nos entrega alegrías que nos hacen sonreír.
Atte. El Noctámbulo más Despierto.
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