sábado, 24 de julio de 2010

Gracias...



En circunstancias que tiempo atrás hubieran sido poco comunes te conocí, al principio pensé que era solo el principio de nada, pero con el tiempo se convirtió en el principio de todo, o eso es lo que llegue a sentir en ese momento de la historia, historia incierta como muchas en esta vida, la cual se fue alimentando de palabras, tan hermosas como la luna llena y el arcoíris que refleja en las nubes, pero lo que falto fue pasión verdadera, ya que palabras sin sentimientos verdaderos, terminan siendo sólo palabras que se las lleva el viento.  Quizás nuestra ceguera nos hizo pasar muchas cosas por alto, pero el dolor y la distancia nos despertaron, de ese sueño tan romántico e idílico, en el cual se bañaban nuestros corazones para limpiar dolores del pasado.

Ame, fui feliz, y sobre todo, aprendí a dejar ir,
Me reencontré con el amor por las palabras,
Y con la esperanzas de un mejor mañana,
Gracias a ti, ahora tengo nuevas fuerzas para seguir,
Y aunque no estés, siempre recordare,
La amistad y el amor, las palabras y la esperanza,
Que pude descubrir, al tenerte alguna vez en mí.


Atte. El Noctámbulo más despierto.

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